Ni una barrera más

Hoy, en el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, y los 364 días del año restantes, todos los que formamos parte de las diferentes administraciones públicas, con el grado de responsabilidad que sea, debemos hacer examen de conciencia.

No basta con declaraciones de buenas intenciones, no basta con leyes, normas, reglamentos ni códigos técnicos de la edificación si a la hora de la verdad todo queda en papel mojado.

No lo he vivido nunca en primera persona, pero mi experiencia familiar me ha hecho vivir muy de cerca los problemas que puede llegar a plantear algo tan simple y cotidiano como un simple paseo por pueblos como Ortuella cuando se sufre algún tipo de discapacidad.

No sólo son necesarios Planes de Accesibilidad, sino la voluntad sincera de llevarlos a la práctica para eliminar todas las barreras arquitectónicas que hay en nuestros cascos urbanos y en todos nuestros edificios públicos.

Y por supuesto, ni una barrera más en nuestras mentes y corazones, que son las que realmente impiden una integración plena y efectiva de las personas con discapacidad.